lunes, 3 de octubre de 2011

PERFIL DE LA MOSQUITA MUERTA

La mosquita muerta es la típica mina que está hecha mitad de pelotuda mitad de puta. Que nunca se sabe si es o se hace. La falsa copada que mete la mano mas lejos de donde debe pero pone la mejor cara de opa que tiene en el stock intentado ser sutil.

Su misión es demostrarse a sí misma que ella puede. Va en búsqueda de tipos comprometidos disfrazada de amiga buena onda. Y generalmente quiere llamar la atención gritando, bailando, emborrachandose o intentando parecer sexy. No siempre lo consigue. Es realmente como una mosquita, generalmente aparece de noche zumbando cerca de la oreja pero a la luz desaperece. Igual de insistente y pesada.

La mosquita muerta intenta estar dentro del entorno pero lo suficientemente distante como para no levantar sospechas. Nunca es la líder pero pertenece al grupo. Tampoco pasa desapercibida. Siempre que puede mete la cuchara. Y necesita dos o tres monitos que le festejen las pavadas que hace para sentir que va por el buen camino.

Nunca entiende los chistes en doble sentido y se pone colorada cuando se tocan temas subidos de tono pero, cuando uno menos se lo espera y en el contexto equivocado, acota comentarios desubicados, provocativos y obsenos dejando a los testigos con sentimiento de vergüenza ajena. Generalmente es flaca y tiene pocas curvas pero está a menudo sobándose a si misma como si amasara pizzas caseras. Que dicho sea de paso, cae de maduro que cocina como el culo.

La mosquita muerta toma cualquier muestra de interés de la persona a la que pretende como un triunfo. Un punto mas a sumar en su lista de conquistas. Y lo comparte. Siempre necesita compartirlo. Darlo a conocer. Es arpía, calculadora y paciente pero no le da la cabeza para ultimar todos los detalles, queda en evidencia mas de una vez. No tiene códigos y difícilmente límites. Suele ponerse como objetivo hombres emocionalmente débiles y mal atendidos.

Lo que la mosquita muerta no entiende es que para toda acción existe una reacción. Por cada una de ellas hay otra mina el doble de puta y la mitad de pelotuda siguiéndole los pasos. Minas que sí tienen códigos, generalmente mas experiencia y picardía. Que no necesitan demostrar nada pero que actúan súbitamente en el momento oportuno. Por cada rata dispuesta a comerse el queso que no le corresponde existe un gato con las uñas bien afiladas. Una que ya se cansó de acostarse con tipos casados o comprometidos. Que sabe cómo se reparten las cartas.

La mosquita muerta tiene dos caminos: darse por vencida o asumir las consecuencias. ¿Cuál de los dos toma? Depende. Hay que ver si quiere seguir volando o morir aplastada.

2 comentarios:

  1. GENIAL, SON ASI !!! LAS DETESTOOOOOOOOOOO !!!!!!

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  2. muy bueno :) lo voy a compartir!!
    maia ushuaia

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